Experiencias
Cartagena de Indias
Es una ciudad llena de vida, de cultura y color. Tan inteligente como irreverente, Cartagena es hogar de grandes figuras de la cultura, la moda, la gastronomía, la música y el arte, por lo que siempre hay alguien interesante que conocer, algo inolvidable que experimentar. El hotel Capellán de Getsemaní es un punto de encuentro, donde se producen, a veces de manera espontánea, a veces diseñadas con toda intención, experiencias únicas en Cartagena. Veladas culturales, conciertos íntimos, encuentros gastronómicos, tardes de rumba, todo sucede en Capellán de Getsemaní.
¿Qué hacer en Cartagena de Indias?
Espléndida bajo el sol y junto al mar Caribe, su sensual ambiente tropical combina historia, arte moderno y una de las gastronomías más auténticas de América Latina.
Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, Cartagena tiene uno de los centros históricos mejor conservados del continente e inspiró al famoso escritor colombiano Gabriel García Marquez.
El barrio de Getsemaní
El barrio donde está el hotel Capellán, a unos cinco minutos caminando del centro histórico de Cartagena se encuentra Getsemaní, uno de los lugares con más encanto de la ciudad donde se han instalado nuevos hoteles, restaurantes y bares en los que se vive la rumba colombiana.
De ambiente bohemio y cultural, este barrio antiguo donde hace más de doscientos años se gestó la independencia de Cartagena, está lleno de historia. Sus coloridas casas conservan la arquitectura colonial y sus calles se han convertido en expresiones del street art con murales y graffitis
La Ciudad Amurallada
Se le llama ciudad amurallada o ciudad vieja, por las murallas construidas por los españoles entre los siglos XVI y XVIII para defender la ciudad de los ataques piratas. Son 11 km de imponentes muros de piedra con fortificaciones y baluartes.
Alberga el vibrante centro histórico de Cartagena, punto neurálgico de la ciudad donde se encuentra el colorido barrio de Getsemaní, el Teatro Heredia, la casa del marqués de Valdehoyos, el baluarte de Santo Domingo, la Plaza de La Proclamación, la catedral Santa Catalina de Alejandría, el Parque Bolívar, el Palacio de la Inquisición (donde está el Museo Histórico), la iglesia de Santo Domingo, el patio del Centro de Cooperación Española, la Plaza Fernández de Madrid, la iglesia de San Pedro Claver, el Museo Naval del Caribe, la plaza de la Torre del Reloj, el Parque Centenario y el antiguo edificio de La Gobernación, entre muchos otros.
¿Qué ver en el barrio de Getsemaní?
La Torre del Reloj
De 30 metros de altura, era la única entrada a la ciudad, así que tiene un enorme valor histórico. Después de que fue parcialmente destruida, como parte de su restauración se le agregó una fachada de estilo barroco y cuatro columnas toscanas que la adornaban, además de dos bóvedas laterales. En 1888 se cambió su diseño por uno octagonal, modificando su estilo de gótico a barroco.
Hoy su reloj importado de Suiza, en sustitución del reloj original que fue traído de Estados Unidos, está considerado como uno de los relojes más bellos del mundo.
Plaza de la Trinidad
Es el lugar perfecto para contemplar la vida del barrio. Ahí se encuentra el monumento de tres estatuas a la memoria de Pedro Romero, quien lideró el movimiento de los lanceros de Getsemaní, artesanos que participaron en las primeras manifestaciones independentistas de La Heroica Ciudad de Cartagena en 1811.
La Iglesia de la Santísima Trinidad
Inspirada en la catedral de Cartagena, está considerada como el segundo templo más importante de la ciudad. Sus capillas colaterales forman una cruz sobre las que descansa una pilastra que sostiene el arco del triunfo.
Iglesia de la Tercera Orden
Se ubica en la esquina de la Calle Larga y data del siglo XVIII. Su construcción es sencilla, pero en su interior el piso es de mármol cristalizado, el techo tiene un bello diseño de mosaico, las bancas son de madera secuoya, tiene dos pilas de agua bendita de basalto negro y una imagen de Nuestra Señora de los Dolores.
Callejón Angosto
Como se ha hecho popular en otras partes del mundo, Getsemaní tiene una calle decorada con paraguas de colores que se ha hecho famosa, está en el Callejón Angosto que comunica las Calles del Pozo y Espíritu Santo donde hay grafittis y buganvillas.
Castillo de San Felipe de Barajas
Construido en 1657 este castillo es una de las fortalezas más sorprendentes de la ingeniería española en América. Se puede recorrer completo, incluso los túneles construidos para escuchar los ruidos que ocurrían en el interior del castillo y que facilitaban las comunicación con el exterior.
Ermita de San Roque
Se encuentra en la calle del Espíritu Santo, su fachada e interior son de estilo sencillo lo cual no sorprende pues se cree que el motivo que dio origen a su fundación fue una epidemia de peste en el siglo XVII.
Plazuela del Pozo
Antiguamente en esta plaza los habitantes de Getsemaní realizaban fiestas populares que con el paso del tiempo dejaron de hacerse. Hoy esta plazuela es un buen lugar para descansar y admirar las originales esculturas de Edgardo Carmona.
El Parque Centenario
Escenario de la vida del barrio y lugar de esparcimiento para locales y visitantes, es un espacio con bellos jardines, fuentes y sombras acogedoras para protegerse del sol y relajarse. Es un parque de estilo francés con arcos en las puertas de entrada que dan hacia el Camellón de los Mártires.
El Camellón de los mártires
Conecta al Centro Histórico con el barrio Getsemaní, fue construido en homenaje a varios independentistas que fueron fusilados en este lugar bajo el dominio español de Pablo Morillo. Hoy en día es un lugar con aire bohemio para caminar o sentarse en sus bancas de mármol.
El Centro de convenciones Julio Cesar Turbay Ayala
Es un centro de eventos con capacidad hasta para 6.450 personas que además de ser moderno y versátil ofrece vistas espectaculares de la antigua Cartagena y la bahía de las Ánimas. Es escenario de obras de teatro, espectáculos musicales, proyección de películas y grandes congresos.
Muelle de Pegasos
Se encuentra junto al Centro de Convenciones y se le llama así porque lo adornan dos esculturas de hermosos caballos alados llamada pegasos en la mitología griega. Recorrerlo ofrece un paseo agradable, especialmente al atardecer para contemplar las luces de la ciudad de Cartagena.